2019 fue sin dudas el año que marcó el regreso de Eldrick Tont Woods, Tiger para todos, a los primeros planos y a la mirada de todo el mundo del golf después de una larga década.
El nacido en California atravesó su carrera y su vida personal de 2009 a esta parte con algunos momentos buenos, pero muchos más de los malos.
Del 12 al 16 de junio de 2008 se disputó el US Open en Torrey Pines en San Diego, California. En ese campo Tiger festejó su major número 14 (el último hasta 2019) tras jugar un playoff ante Rocco Mediate.
Durante el torneo fue evidente que el Tigre arrastraba algunos problemas físicos que lo complicaban cada vez que realizaba su swing, pero esto no le impidió coronarse con un nuevo grande. Dos meses antes, el 15 de abril, se había sometido a una artroscopia en su rodilla izquierda.
Dos días después de su consagración reveló que durante su rehabilitación sufrió una doble fractura por estrés en la tibia de su pierna izquierda. Tras el US Open tuvo que pasar por el quirófano nuevamente, esta vez para arreglar el ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda y recuperarse de la fractura por lo que anunció en su página oficial que se perdería el resto de la temporada.
Su regreso a los campos se dio ocho meses después, el 25 de febrero de 2009 en el WGC- Match Play Championship. En lo que Associated Press llamó “uno de los regresos más anticipados en el deporte”. Fue eliminado en el segundo día por el sudafricano Tim Clark.
Ese año su primer título fue el Arnold Palmer Invitational el 29 de marzo. Pero no pudo aprovechar su envión para volver a ganar el Masters de Augusta, dónde terminó sexto a cuatro golpes del ganador, el argentino Ángel Cabrera.
En el 2009 ganó un total de seis torneos: además del ya mencionado se consagró en el Memorial Tournament, el AT&T National, el Buick Open y la semana posterior en el WGC- Invitational. En septiembre festejó en el BMW Championship y al ser segundo en The Tour Championship se quedaría con la FedEx Cup.
En el US Open finalizó sexto y en el British Open no pasó el corte por segunda vez desde que se hizo profesional. Después perdió el último Major de año, el PGA Championship, donde sorprendió por un dato sin precedentes: por primera vez en su carrera no se consagraba en uno de los grandes tras llegar como líder a la última vuelta, al caer ante el coreano Y. E. Yang por tres golpes. También significó que finalizaría el año sin ganar un Major, algo que no pasaba desde 2004.
Además de todo esto su vida personal se desmoronaba por una serie de publicaciones de un diario sobre su intimidad. En esos días el golfista sufrió un confuso accidente automovilístico que le dejó heridas leves pero fuera de la competencia hasta el próximo año.
Finalmente, en agosto de 2010 y tras siete años de matrimonio se divorció de su esposa, Elin Nordegren.
Por el escándalo se mantuvo fuera de los campos en el arranque de esa temporada y recién en marzo anunció que sería parte del Masters de Augusta en abril. Compitió hasta el último día pero finalizó cuarto.
Después estuvo en The Players Championship, el cuál abandonó en la última ronda y más tarde afirmó que tenía una lesión en el cuello. Luego de esto su entrenador desde 2003, Hank Haney, renunció a su trabajo junto a él.
En el US Open en junio volvió a finalizar en la cuarta posición tras un gran tercer día. En los dos últimos Majors del año repitió malas actuaciones y terminó lejos de la contienda. En los siguientes torneos del resto del año no recuperó su mejor forma y por eso el 2010 fue el primer año desde que se convirtió en profesional en el no pudo ganar ningún torneo.
En 2011 participó en nueve torneos sin ningún triunfo, entre ellos el Masters donde nuevamente llegó al cuarto puesto y el PGA Championship donde no pasó el corte. Su ausencia en varios de los torneos, incluidos los otros majors, se debió a sus problemas físicos. Sentía dolor en el tendón de Aquiles y en el ligamento cruzado de su pierna izquierda.
Ya en el 2012 recuperó en gran parte su forma competitiva y compitió en 19 eventos a lo largo del año, ganando tres. Sin embargo, su rendimiento en los cuatro grandes fue decididamente malo a excepción del Open donde compartió la tercera posición.
Para el siguiente año Tiger mantuvo su competitividad al participar en 16 torneos, festejando en cinco de ellos. Pero nuevamente no pudo trasladar sus buenos resultados en los Majors: terminó cuarto en Augusta y sexto en el British Open.
En el arranque de 2014 mostró un bajo nivel y nuevamente los problemas físicos lo obligaron a abandonar la competencia. Se realizó una intervención para tratar una hernia de disco, lo que le hizo perderse el Masters y el US Open. Volvió para participar en el Open pero terminó muy lejos y finalmente no pasó el corte en el PGA Championship.
Al siguiente año continuó aquejado por los dolores en su espalda pero sorprendió con su actuación en el Masters donde culminó en la 17° posición. Pero en los restante majors no logró pasar el corte. En septiembre volvió a pasar por el quirófano para hacerse una disectomía para la hernia discal.
Por la operación, Tiger se perdió el Masters de Augusta en abril y aseguró que “no hay una fecha para el regreso”. En ese 2016 no participó en ningún torneo oficial para enfocarse en su recuperación.
Su regreso tras 18 meses fue en el Farmers Insurance Open en enero de 2017, dónde no alcanzó a pasar el corte. Y tuvo que abandonar en la siguiente competencia por espasmos en la espalda. En abril sería intervenido por cuarta vez por sus problemas de espalda y estaría inactivo el resto del año.
En mayo de ese año viviría otro escándalo extradeportivo cuando fue arrestado cerca de su residencia en Florida al ser encontrado durmiendo dentro de su auto.
El 2018 sería el año de la vuelta del ‘Tigre’ a la máxima competencia, ya que participó en 18 eventos y volvió a consagrarse después de cinco años en el último torneo de la temporada, The Tour Championship.
Pero sobre todo se destacó en el Open, donde durante la última ronda fue temporalmente el líder para terminar sexto y en el PGA Championship en el que finalizó segundo a dos golpes del ganador.
En marzo de 2019 tuvo que bajarse de un torneo por un inconveniente de tensión en el cuello y encendió las alarmas. Sin embargo, participó en dos eventos antes de presentarse en el Masters de Augusta donde, tras llegar a la cuarta ronda a dos golpes del líder, realizó una vuelta sin complicaciones para consagrarse en un major tras once años. Por este logro el presidente Donald Trump le otorgó la Medalla Presidencial de la Libertad por su increíble regreso.
En el US Open de esa temporada terminó lejos del campeonato mientras que en el PGA y el British Open no logró pasar el corte. En octubre, tras una intervención menor en la rodilla, Tiger se quedó con el inaugural Zozo Championship en Japón, su torneo 82 en el PGA Tour ,igualando el récord de Sam Snead como máximo ganador.
El Masters de 2019 significó el decimoquinto Major en la carrera de Tiger, que lo deja a tres del máximo ganador de la historia, Jack Nicklaus con 18.
Pero en el arranque de 2020 la pandemia de Coronavirus obligó a cambiar los planes para las competencias deportivas y también para el golf. El Open anunció que no se disputará este año mientras el PGA se hará en agosto, el US Open en septiembre y el Masters en noviembre. Estas son las oportunidades de otro zarpazo a la gloria.
Los Majors de Tiger:
. Masters de Augusta 1997, 2001, 2002, 2005, 2019
. US Open 2000, 2002, 2008
. British Open 2000, 2005, 2006
. PGA Championship 1999, 2000, 2006, 2007